17 de junio de 2015

We do our best, we are trying, believe it or not




Me encanta el tráiler de esta peli…





Hay tantos detalles… en estos casi 3 minutos… dan ganas de reir y llorar al mismo tiempo

10 de junio de 2015

Carta de una madrastra a una madre





Escrita con propósito de enviarla a su destinataria real pero con la impresión de que no haría sino empeorar la cosas, aquí os dejo la carta que he escrito este fin de semana a la madre de mi hijastra. Al menos la leeis vosotras, que seguro que en algo coincidimos.




Querida Xxx,

Tras los múltiples whatapss recibidos por mi marido el pasado fin de semana donde criticas abiertamente mi persona y la mala influencia que ejerzo sobre tu hija (mi hijastra) he decido ponerme en contacto contigo con el fin de que comprendas algunas cosas.


Tu falta absoluta de empatía, tu idea de que ostentas la verdad absoluta y tu incapacidad de autocrítica me sorprende e irrita a partes iguales pero voy a hacer un último esfuerzo para evitar tus mensajes tóxicos sobre mi vida familiar.


Vamos por puntos:

  • Te recuerdo que tú has querido la CUSTODIA monoparental y has hecho todo lo posible para desprestigiar al padre de tu hija y evitar que le otorguen la custodia compartida que solicita desde hace años y que, de hecho, ejerce en la práctica. Este hecho en sí mismo, ya dice bastante poco de ti como madre y mujer porque sabes que es un padre estupendo, que vivimos muy cerca para facilitar las cosas, que sigue con detalle toda la vida de la niña, que es, simplemente, un buen padre.
  • Ya que tienes legalmente la custodia de tu hija conviene recordarte que la custodia otorga unos derechos y también una serie de OBLIGACIONES. Tu hija llega a mi casa con lo puesto, es decir, con el uniforme, del que ni siquiera compras muda ni unos calcetines para que vaya limpia desde mi casa. No le preparas nada de nada para los días que está en mi casa, es decir, para aprox el 40%  del tiempo, y tenemos además que comprar todo tipo de ropa y calzado (además de disfraces, material escolar y extraescolar, y un largo etc.) para cubrir lo que se supone que tú debes hacer con la pensión de alimentos que ya recibes y que asciende a una cuantía muy elevada. Si quieres ejercer una custodia compartida, te invito a que la firmes delante del Juez.  
  • Tú has llegado a decir que tu hija es la babysitter de mis hijos. Puedo asegúrate que no lo es. Es la HERMANA mayor de mis hijos, juegan, se cuidan, se pelean como hermanos que son. En ocasiones, tu hija acompaña a sus hermanos a la piscina o a un cumple, como mis hijos pequeños acompañan a tu hija cuando es a la inversa. Somos una familia de cinco miembros y trabajamos en equipo para que todos aprendan lo que es respeto, paciencia, solidaridad y FAMILIA. Tú que vienes de una familia grande supongo que sabes a qué me refiero. Me parece increíble que teniendo tres hermanos puedas ser tan cerrada en reconocer la importancia de los hermanos en la vida de niños y adultos. A este respecto te pediría encarecidamente que dejes de llamarlos medio-hermanos o hermanastros, a tu hija le duele y nos ha contado avergonzada el desprecio con el que te refieres a ellos. 
  • Amenazas con denunciarme porque dices que te insulto y te provoco con mi saludo cuando coincidimos en la puerta del colegio. No quisiera ponerme más paternalista pero de nuevo tengo que recordarte que saludar es un acto de cortesía y buena educación, importante siempre, pero sobretodo en la puerta de un colegio y delante de tu hija y la mía. Debemos dar ejemplo. Esto no significa que te aprecie o quiera ser tu amiga, tan sólo que soy una Sra. educada y que tu presencia realmente no me altera. Te saludo como a docenas de personas con las que me cruzo a diario. Si quieres hacer más el ridículo puedes intentar denunciarme por saludar, pero los riesgos de que se rían de ti son bastante altos. Piénsalo bien. Yo por mi parte te seguiré saludando. Lamento las molestias que mi sonrisa te produce. 
  • Dices que tu hija me tiene miedo y que le "pongo caras" cuando me cuenta cosas. Esto la verdad, sí que me ha dolido. A tu hija la quiero mucho y aunque no te doy mucha credibilidad, el simple hecho que digas que me tiene miedo me lleva a reflexionar y a repasar las cosas y conversaciones que tengo con ella. He analizado mucho y creo absolutamente que te equivocas. No me tiene miedo, en absoluto. Habla conmigo, ríe conmigo, me abraza, me besa, me toma el pelo, me coge de la mano, me dice te quiero al oído, me pide que la ayude a estudiar, que le ayude a lavarse el pelo, que le haga una trenza, comparte conmigo historias de sus amigas del cole, etc., etc. etc. No me tiene miedo. Mi percepción, contrastada con mi marido, es que lo que tiene es miedo de decirte que se siente bien conmigo y que tú consigues reprimir con tus paranoias todos los sentimientos positivos que tiene cuando está con nosotros hasta tal punto que tan sólo te cuenta las cosas malas (que también las hay). Las discusiones caseras, mi dolor de manos, la pataleta de su hermana… A lo que sí tengo que darte la razón es a eso de que "le pongo caras". Dicen que la cara el espejo del alma y yo, cuando me muerdo la lengua, pongo cara rara y se me nota que estoy incómoda. El otro día, sin ir más lejos, en una conversación antes de dormir, me dijo avergonzada y triste, que ella piensa que su madre está celosa de mí, que se lo han dicho sus amigas. Que te burlas en casa de su padre y de mí y nos críticas en el cole y que le da pena pensar que me voy a quedar sin amigos…imagínate mi cara. Pues un poema. Hombre podría haber dicho lo que pienso, que sí, que eres una celosa y enviosa y que tu comportamiento es despreciable. Pero al final lo que traté de trasmitirle es que no se preocupe por mis amigos, que los tengo y saben quién soy, que a mí lo que me importa es que ella sepa que la queremos mucho y que no hacemos nada malo. Y acabamos con un abrazo. Después me tuve que tomar un gintonic porque se me salía el corazón por la boca.
  • Unos días me llamas entrometida porque hago muchas cosas por tu hija, lo que te molesta. Otras dices, dices que como no es mi hija pierde oportunidades porque no nos preocupamos de ella, lo que también te molesta. En este punto te diré, lo primero, que te aclares. No puedes mantener un argumento y el contrario, porque pierdes toda la credibilidad. En segundo lugar, tu hija y mis hijos son iguales en mi casa, todos tiene las mismas oportunidades y su padre y yo nos ocupamos muy mucho en educar en igualdad.

En suma, por favor, deja de hacerme protagonista de tu papel de víctima, de tus conversaciones de maruja, de tus frustraciones. Se educada y vive tu vida, le harás un gran favor a tu hija para poder crecer con equilibrio y mentalmente segura y sana.

En próximas ocasiones si tienes quejas con respecto a mí, habla conmigo, soy una tipa bastante abierta y te aseguro que, al menos, te voy a escuchar.

Un saludo,

Mami y madrastra